17/03/2016
- La Junta de Gobierno ha aprobado el Mapa de Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana, que suma 3.546Ha donde viven 1.298.326 personas: el 38% de la población de la ciudad.
- Las Áreas Preferentes se encuentran en barrios como El Lucero, Los Cármenes, San Isidro, La Elipa o Aluche; en cascos históricos como el de Carabanchel, Vicálvaro o Barajas y en un buen número de colonias
- La iniciativa es una respuesta integral y sostenible a los retos que la ciudad debe afrontar relativos al medio ambiente, la economía y la cohesión social
Mejorar la calidad de las viviendas para mejorar la calidad de vida de miles de ciudadanos. Reequilibrar la ciudad y lograr una mayor cohesión social. Responder a los retos medioambientales. Son los objetivos de la campaña de regeneración urbana que va a poner en marcha el Ayuntamiento de Madrid mediante una inversión prioritaria en la mejora de la accesibilidad y el mantenimiento de la temperatura interior de los hogares con reducción de consumo energético. La campaña, que supone una primera fase de un plan de regeneración a largo plazo, arrancará con 16 millones de euros de inversión bianual, que serán destinados a ayudar a los ciudadanos a realizar las obras en 109 Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana.
Hasta ahora, el modelo urbanístico se ha centrado en la creación de nuevos desarrollos residenciales periféricos y en las actuaciones en el centro histórico. La declaración de las 109 Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana es un paso más en el nuevo enfoque del planeamiento urbanístico que ha impulsado el gobierno municipal: más social, más sostenible, más participado y más centrado en la ciudad existente.
Tras la aprobación hoy por la Junta de Gobierno del Mapa de Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana (APIRU) y su correspondiente periodo de información pública, la campaña comenzará a llevarse a cabo en los próximos meses.
Para determinar las zonas de intervención, los técnicos del Área de Gobierno de Desarrollo Urbano Sostenible han analizado el patrimonio edificado de la ciudad y han definido situaciones de vulnerabilidad en los distintos distritos, partiendo de unos indicadores relativos a la edad de la edificación, su valor catastral, el porcentaje de población sin estudios o porcentaje de población envejecida. Tras el análisis, se han delimitado los espacios físicos identificados como Áreas Preferentes de Impulso a la Regeneración Urbana. Entre todas suman una superficie de 3.546Ha donde viven 1.298.326 personas, lo que representa el 38% de la población de la ciudad.
Estas APIRU se encuentran, entre otros, en barrios como El Lucero, Los Cármenes, El Pilar, Bellas Vistas, San Isidro, La Elipa o Aluche; en los cascos históricos como el de Aravaca, Carabanchel, Vicálvaro, Barajas y Hortaleza; y en un buen número de colonias como Villa Rosa, Urpisa, las Moreras, San Francisco Javier o San Fermín.
Cambio de política
El plan forma parte de una de las estrategias formuladas por el gobierno municipal: el reequilibrio territorial y social de la ciudad, mediante actuaciones de regeneración urbana, con especial énfasis en barrios vulnerables que requieren intervenciones con carácter prioritario. Es decir, una estrategia para conseguir una ciudad más equitativa, más habitable y más cohesionada, mediante una respuesta integral y sostenible a los retos que la ciudad debe afrontar relativos al medio ambiente, la economía y la cohesión social.
Entre la almendra central y los desarrollos periféricos, se encuentran los barrios con abundancia de vivienda social, construidos entre 1950 y 1980, con tipología mayoritaria de bloque abierto, que ahora requieren una atención prioritaria. De los 1,5 millones de viviendas que tiene la ciudad de Madrid, el 70% son anteriores a 1980, fecha a partir de la cual se comienzan a aplicar la primera norma técnica de aislamiento en edificios. En estos casos, con una rehabilitación realizada con criterios de eficiencia energética se pueden conseguir ahorros de 70-80% de los consumos energéticos actuales.
España es el cuarto país de la UE con más hogares incapaces de mantener la temperatura adecuada en sus viviendas. El 17% de los hogares españoles – más de 7 millones de personas - tienen dificultades para pagar las facturas relacionadas con la energía doméstica al tener que soportar un gasto desproporcionado en relación con sus ingresos. A la vista de ello, las actuaciones de rehabilitación de viviendas, además de mejorar la calidad de vida, colaborarán a evitar la degradación urbana, el riesgo de exclusión social, y se consideran parte de las acciones contra la desigualdad./
No hay comentarios:
Publicar un comentario